¿Cuáles son las Alteraciones en la voz existentes?
LAS DISFONÍAS
La voz es un sonido que es producido por la laringe a partir del aire pulmonar espirado, luego este es amplificado y reforzado por las cavidades de resonancia (faringe, cavidad nasal, cavidad bucal y labios). Pero, además, la voz refleja los diferentes estados de ánimo de la persona, su personalidad, salud, etc.
El cerebro gobierna la puesta en marcha del instrumento vocal y dirige la ejecución de todos los movimientos musculares implicados (caja torácica, pulmones, cuerdas vocales y órganos resonadores).
La disfonía es la alteración de algunas de las cualidades acústicas de la voz (tono, intensidad, timbre y duración) como consecuencia de un posible trastorno orgánico o por el uso inadecuado de la voz (funcional), pudiendo ser permanente o transitorio. Por lo tanto, la afonía sería la pérdida total de la voz.
Las alteraciones de la voz puede ser orgánica, fisiológica, psicológica e incluso ambiental, existiendo algunos factores que determinan la aparición de dichas alteraciones o que las mantienen, hasta poder agravarlas, como las enfermedades del aparato respiratorio (laringitis, bronquitis crónicas, asma, vegetaciones…), malformaciones laríngeas, intervenciones quirúrgicas, traumatismo laríngeo, uso respiratorio y vocal inadecuado, características comportamentales, el ambiente familiar y social y las alteraciones de la audición, entre otros.
Determinar en qué grado es patológica una voz no siempre es fácil, ya que son múltiples los factores que influyen directamente en dicha estimación (factores culturales, edad, sexo, exigencias profesionales, circunstancias afectivas y emocionales, autovaloración de la propia voz…).
Así pues, para realizar un diagnóstico con precisión de una patología vocal es preciso realizar primero un estudio exhaustivo y minucioso en el que se incluya, además de los datos relativos a los antecedentes familiares y personales, así como a la historia de la enfermedad, una exploración orgánica de la faringe, laringe y cavidades de resonancia, una exploración funcional de la actitud postural, coordinación fono- respiratoria, débito vocal y tiempo máximo de fonación y espiración y un análisis acústico de la voz de la frecuencia fundamental, extensión tonal, intensidad y fonetograma.
Alteraciones en la Voz
¿Cuáles son las Alteraciones en la voz existentes?
LAS DISFONÍAS
La voz es un sonido que es producido por la laringe a partir del aire pulmonar espirado, luego este es amplificado y reforzado por las cavidades de resonancia (faringe, cavidad nasal, cavidad bucal y labios). Pero, además, la voz refleja los diferentes estados de ánimo de la persona, su personalidad, salud, etc.
El cerebro gobierna la puesta en marcha del instrumento vocal y dirige la ejecución de todos los movimientos musculares implicados (caja torácica, pulmones, cuerdas vocales y órganos resonadores).
La disfonía es la alteración de algunas de las cualidades acústicas de la voz (tono, intensidad, timbre y duración) como consecuencia de un posible trastorno orgánico o por el uso inadecuado de la voz (funcional), pudiendo ser permanente o transitorio. Por lo tanto, la afonía sería la pérdida total de la voz.
Las alteraciones de la voz puede ser orgánica, fisiológica, psicológica e incluso ambiental, existiendo algunos factores que determinan la aparición de dichas alteraciones o que las mantienen, hasta poder agravarlas, como las enfermedades del aparato respiratorio (laringitis, bronquitis crónicas, asma, vegetaciones…), malformaciones laríngeas, intervenciones quirúrgicas, traumatismo laríngeo, uso respiratorio y vocal inadecuado, características comportamentales, el ambiente familiar y social y las alteraciones de la audición, entre otros.
Determinar en qué grado es patológica una voz no siempre es fácil, ya que son múltiples los factores que influyen directamente en dicha estimación (factores culturales, edad, sexo, exigencias profesionales, circunstancias afectivas y emocionales, autovaloración de la propia voz…).
Así pues, para realizar un diagnóstico con precisión de una patología vocal es preciso realizar primero un estudio exhaustivo y minucioso en el que se incluya, además de los datos relativos a los antecedentes familiares y personales, así como a la historia de la enfermedad, una exploración orgánica de la faringe, laringe y cavidades de resonancia, una exploración funcional de la actitud postural, coordinación fono- respiratoria, débito vocal y tiempo máximo de fonación y espiración y un análisis acústico de la voz de la frecuencia fundamental, extensión tonal, intensidad y fonetograma.
Las distintas disfonías se pueden clasificar en función de tres criterios:
Cuantitativo
- Afonía: pérdida total de la voz.
- Disfonía: alteración de la voz en cualquiera de sus cualidades.
Localización
- Laringofonías: son disfonías localizadas en la laringe y que ocasionan un tono inadecuado, ronquera vocal (o voz muy fuerte, sin timbre y demasiado grave), laringitis funcional (con procesos inflamatorios por un abuso prolongado de la voz gritada) y fonastenia o cansancio vocal (voz débil, poco profunda y sin timbre).
- Rinofonías: son alteraciones de la resonancia nasal de la fonación.
Pueden ser
- Rinofonías abiertas: el aire se escapa por la nariz durante la fonación.
- Rinofonías cerradas: una obstrucción nasal que impide el paso del aire por las fosas nasales y perjudica la calidad de la voz.
La intervención logopédica de las alteraciones de la voz va dirigida a restablecer una postura adecuada y mecánica respiratoria correcta, reducir la tensión muscular y eliminar los esfuerzos laríngeos, así como adaptar las cavidades de resonancia al sonido emitido por la laringe.
Al inicio de la reeducación vocal, se proporciona según los casos una información detallada al paciente sobre la correcta higiene vocal orientada a disminuir las agresiones vocales y a ejercitar una prevención activa. Además del aconsejando de reducir hábitos tóxicos y factores ambientales (ambientes secos, fríos o muy calientes, cambios bruscos de temperatura ambiental…), no hacer un uso prolongado de la voz, tratar adecuadamente las alteraciones e infecciones de las vías aéreas superiores, en resumen, mantener un ritmo de vida lo más sano posible y emplear la voz a un volumen moderado.